El Libro Economía Verde, ofrece respuestas realistas

La pandemia aumentó la preocupación y aceleró los tiempos: la cuestión ambiental es hoy percibida como más temible y urgente que hace un año. Primero, porque la velocidad a la que se diseminó el virus confirmó que hay fenómenos que nos dejan sin tiempo de contenerlos. Segundo, por su ostentoso alcance global. Tercero, por la magnitud de los cambios que nos impuso. Funcionó, a la vez, como instancia y metáfora de desastre global. Así, abrió los ojos a la inminencia de otros desastres: los ambientales.

“El cambio climático, la contaminación de aguas, suelos y aire; la pérdida de biodiversidad y la generación exponencial de basura no son una amenaza sino una realidad”, advierte la periodista científica Gabriela Ensinck en las primeras páginas de Economía verde. Innovación y sustentabilidad en América Latina.

En un volumen compacto y valioso, Ensinck recorre aspectos clave para entender los debates centrales y la toma de decisiones ciudadanas. Conceptos como huella ecológica o deuda ambiental, que vinculan aspectos ecológicos con económicos y políticos, son explicados de manera tranquila pero argumentativamente contundente. También hay capítulos temáticos, como los dedicados a la problemática de la urbanización y de la producción de alimentos y de energía.

Pero no todo es estructural, aclara la autora. También está lo personal y hasta lo lúdico que, en su aparente liviandad, nos impiden reconocer nuestro pesado paso sobre la Tierra: la cultura del consumo y el descarte. A estos sesgos contrapone propuestas de consumo responsable, iniciativas de precio justo y hasta se mete con la moda, resaltando enfoques que pueden volverla más ética.

Ensinck también presenta soluciones como la noción de economía circular, que propone transformar la linealidad del proceso de obtención, producción, uso y descarte de los recursos en un circuito en que los desperdicios vuelven al inicio del ciclo. Es el momento de actuar, como destaca la bióloga y ecóloga Irene Wais de Badgen en su prólogo. “No hay manera de enfrentar semejante disyuntiva sin un abordaje integral, es decir, relacionando todas las variables disponibles”, dice el periodista Sergio Elguezábal en el suyo. Conjugan así las dos mayores virtudes del libro: el hecho de que ofrezca respuestas, y que estas sean articuladas y realistas.

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