Importancia de la atención fonoaudiológica en la primera edad

El desarrollo del lenguaje, en la etapa del infante, es muy importante. Las intervenciones de los profesionales durante la etapa escolar es fundamental para el correcto desarrollo del aprendizaje. Para dialogar sobre esto, COMMA habló con la Fonoaudióloga Florencia Haustein (MP 2967), para despejarlos de las dudas que puedan tener como padres.

Al consultarle como determinar si hay dificultad en los estudiantes aseguró que lo primero que hay que hacer es una evaluación previa, “a partir de allí el profesional determina si existe alguna dificultad en el lenguaje, estipula el diagnóstico y propone un tratamiento”, dijo.

Lo que se busca con los tratamientos es maximizar las competencias de los niños estudiantes para prevenir trastornos comunicativos fuertes, “para lograr que el rendimiento escolar no sea bajo a consecuencia de la patología determinada”, añadió.

Al consultarle cuáles son los desórdenes más recurrentes en los niños, aseguró que el Trastorno del Desarrollo del Lenguaje (TDL), “en este caso se presenta cuando existe un desfase en el desarrollo lingüístico la consecuencia de esto puede ser un avance educativo más lento que los demás niños de su edad y presenta dificultades para poder comunicarse o seguir instrucciones”, explicó la profesional. Hizo hincapié en que esta alteración afecta sólo el lenguaje, por lo mismo es específica aunque en ocasiones va acompañado de trastornos neurológicos, como el déficit intelectual o auditivo.

En relación al TDL existen dos tipos, el expresivo y el mixto. Explicó que el primero se ve alterada la parte expresiva del lenguaje, lo que no permite una buena expresión. Por su parte, el mixto, se ve alterada tanto la expresión como la comprensión.

Haustein señaló que los Trastornos de los Sonidos del Habla (TSH) es otra de las patologías que se da con mucha incidencia en los niños escolares. “EL TSH se los puede definir como una alteración en la fonética, es decir en la producción articulatoria de los sonidos y en el uso de los fonemas”, señaló. Añadió que esto afecta la claridad del habla y aclara que esto se puede dar en las distintas etapas de la vida.

El primer síntoma a tener en cuenta es cuando un niño tiene un habla compleja o confusa, “donde sus producciones lingüísticas pueden resultar difíciles de comprender, a veces tienden a simplificarla, por ejemplo en vez de decir mariposa, puede llegar a decir `maipocha`.

La profesional aconsejó que ante cualquier duda de este tipo de alteraciones recurra a un fonoaudiólogo, ya que estas alteraciones en el desarrollo normal del lenguaje y habla, pueden persistir en el tiempo e impactar negativamente en el rendimiento escolar del estudiante. “Además también trae consecuencias negativas a nivel emocional y social”, culminó.

Otras notas

Menú