Ley Yolanda en primera persona

Con el consenso de los legisladores provinciales, Tucumán adhirió a la Ley Yolanda. Aprobó por unanimidad la adhesión a la Ley Nacional Nº 27.592, cuyos objetivos es garantizar la formación integral en medio ambiente, con perspectiva de desarrollo sostenible y con especial énfasis en cambio climático. Destinado a las personas que se desempeñan en la administración pública, en todos sus niveles y jerarquías en los tres poderes del Estados.

En su oportunidad COMMA desarrolló el alcance de ésta normativa para abordarla, ahora desde una perspectiva más personalista; teniendo en cuenta la visión de quien, desde el campo de la investigación y educativo, trabaja en pos del bienestar ambiental.

COMMA Comunidad dialogó con el profesor Martín Sirombra, docente de la Facultad de Ciencias Naturales, Instituto Miguel Lillo, y nos abordó la temática desde un punto de vista empírico.

¿Cuál es la importancia de la Ley Yolanda para la Provincia de Tucumán?.

La ley Yolanda, recientemente aprobada su adhesión a la Ley Nacional. Resulta ser de suma importancia para todos los ciudadanos; o solo para quienes trabajamos en cuestiones ambientales, sino de todos,  porque en realidad esto apunta a mejor la saludad y la calidad de vida de toda la población de Tucumán. Si bien no todo el mundo tiene que saber de qué estamos hablando, pero ya intuitivamente hay una necesidad de vivir en un ambiente sano, tanto urbano como rural.

¿Para qué llega esta Ley  a Tucumán?.

La Ley sirve de alguna manera, para que todos los funcionarios de la provincia, de todos los niveles, tengan conocimiento sobre medio ambiente. Esto significa que todas las personas que toman decisiones, tienen que saber cuestiones básicas de salud ambiental. Es importante que conozcan, por ejemplo: aspectos vinculados al cambio climático, o saber aspectos de biodiversidad, o qué madera son nativas en Tucumán, por citar algún ejemplo. También, y sobre todo, saber comunicarlo. Terina siendo importante porque todos tomamos decisiones a diario, pero las autoridades lo hacen en un nivel de importancia; una formación, ayudará a tomar mejores decisiones. Esta ley obliga a que todos nos formemos, sobre todo autoridades en cuestiones ambientales, para que las decisiones que se tomen en despachos, secretarias, juzgado o donde corresponda, sean ambientalmente sustentables.

La Ley Yolanda, suma mucho más de lo que pensamos.

¿Considera qué demoro llegar Ley a la provincia?.

Es una iniciativa que no tiene mucho tiempo, pero más vale tarde que nunca. Tucumán tiene la segunda cuenca más contaminada del país, entonces nosotros estamos viviendo con contaminación importante desde hace muchísimos años. Desde ese punto de vista, tardó en llegar.

¿Cómo trabaja el Instituto Miguel Lillo en materia del cuidado del medio ambiente?.

Tiene muchos proyectos de investigación que aborda la contaminación, justamente desde distintos puntos de vistas. En mi caso yo trabajo con restauración de bosques y procuro armar proyectos de restauración que significa volver a los ecosistemas boscosos, a su estado natural, previos a la desforestación o a su transformación a otros sistemas naturales. Proyectos que, sobre todo, sean socialmente sostenibles. Nuestra idea, y en el caso de los proyectos que dirijo en la facultad, es que la gente entienda cómo funciona un sistema natural y se sienta parte de todo ese mismo sistema. Es una manera de que la gente se involucre y que eviten que ese sistema se deteriore; es la idea para que el proyecto sea exitoso.

Es decir, hacer una bajada de línea desde la parte científica pura y dura hacia conceptos más claros e ideas más sencillas y que puedan ser entendidas por la sociedad y que esta se sensibilice con estos problemas. La idea es lograr que con su granitos de arena, vayan evitando formar basurales, tirar tóxicos a los cursos de agua, y que vayan viendo el valor de las especies nativas, o plantando árboles, entre otras acciones.

¿Cuesta que la ciudadanía vaya tomando conciencia sobre medio ambiente, sustentabilidad o cambio climático?

En realidad cuesta un poco porque son conceptos pocos prácticos y no son fáciles explicarlos y porque creemos que, porque vivimos en una ciudad lo que pasa en el entorno no nos afecta. Y sin embargo nos damos cuenta que la cosa no es tan sencilla. Yo creo que hay muchos grupos de la sociedad que si están tomando conciencia y hay otros que aún les falta, pero es parte del trabajo, y tenemos que hacerlos entre todos: desde la parte científica y ustedes desde los medios de comunicación. Porque resultan ser aliados claves para contar todas estas cuestiones y llegar a otros sectores que por muchos factores, desde la facultad no se llega. No podemos dejar de hacerlo al trabajo, va a costar y llevará su tiempo de madurez. La sensibilización es lo que más importante.

Ley Yolanda ya está sancionada y Yolanda Ortiz era tucumana y usted la conocía…

Si, Yolanda era una persona proactiva, era Doctora en Química, falleció hace algunas años y como tucumana nos visitó en el ámbito de nuestros proyectos en la Facultad de Ciencias Naturales, y nos trajo ideas e inquietudes. Nos comentaba cuáles eran los problemas que debíamos resolver. Estuvo muy asociada al tema montaña, que era un poco lo que nuclea a la parte andina de Latinoamérica, que son los ecosistemas de montaña. Entonces ella, desde las zonas montañosas, promovía reuniones de trabajo y proyectos de investigación con otros países, como Bolivia y Perú, que están afectados por diferentes actividades y hay contaminación.

Fue una persona generosa, siempre inquieta por esas cuestiones ambientales, y por generar una serie de movidas en pro del ambiente. En este sentido creo que tiene un merecido homenaje que la Ley lleve su nombre.

¿Qué diría Yolanda hoy de la Ley sancionada?.

Debe estar viéndolo y debe estar contenta que hayamos podido escuchar a los legisladores, hablando preocupados del medio ambiente, porque esto era impensado muchos años atrás, no estaba en la agenda. No se le llevaba el apunte. Ahora está tomando una dimensión más importante, ahora los funcionarios que tomen decisiones no pueden decir “ah, yo no sabía”,  estas palabras deben quedar atrás.

Después de la ley Yolanda, ¿qué falta?.

Leyes ya tenemos, yo no creo que haya que seguir intentando más leyes, sino poner en práctica todo lo que tenemos. Ley Yolanda, Ley de bosques, ley de Bienes Inundables, entre otras leyes nacionales… lo que falta para mi es la acción. Concretar las capacitaciones, reglamentar la Ley. Me parece que lo que hoy necesitamos es salir al terreno y hablar, ser la vos de las especies, dándoles una oportunidad y a la vez dándonos a nosotros la oportunidad como especie nativa humana, para tener una buena calidad de vida y asegurar la supervivencia

Otras notas

Menú